Por qué con caballos:
Los caballos son animales que por su presencia, belleza, fuerza y nobleza atraen mucho nuestra atención. Estar con ellos siempre genera una gran motivación y bienestar.Esta motivación nos permite abordar aspectos sin que el usuario/a se de cuenta , ya que simplemente estamos cuidando, montando o disfrutando con caballos.
En Aukera hacemos de los caballos nuestros compañeros de trabajo principalmente por 3 motivos, que conjugados entre si nos ayudan a la consecución de nuestros objetivos de trabajo.
1. Cualidades físicas y morfológicas
La elección de los caballos como colaboradores terapéuticos se fundamenta en sus características físicas, guiadas por los tres principios fundamentales de la equinoterapia:
Los caballos, al replicar un patrón de locomoción similar a la marcha humana, ofrecen un estímulo terapéutico que contribuye a la rehabilitación y el desarrollo integral del individuo.
La transmisión de impulsos rítmicos por parte del caballo actúa como estímulo terapéutico, promoviendo la relajación del tono muscular y creando un ambiente propicio para la calma y el bienestar.
La temperatura corporal del caballo se convierte en un estímulo sensorial que favorece la relajación muscular, enriqueciendo la experiencia terapéutica.
Adicionalmente, las dimensiones, la fortaleza y la gracia del caballo brindan una oportunidad única para que la persona explore sus percepciones de vulnerabilidad y control. La imponente presencia del animal genera un respeto que enriquece la experiencia terapéutica, contribuyendo a un contexto propicio para la intervención terapéutica. Esta elección se alinea con nuestro compromiso de ofrecer intervenciones terapéuticas efectivas y centradas en la innovación, integrando aspectos físicos, sensoriales y emocionales para lograr resultados terapéuticos significativos en el desarrollo personal y la calidad de vida.
3. Caracter social y Vínculo Emocional
Por naturaleza, los caballos son animales sociales que viven en manadas y se comunican a través de un lenguaje corporal propio. Su aceptación de la compañía humana los convierte en compañeros ideales, fomentando el desarrollo socioafectivo. Los caballos transmiten cualidades como fuerza, sensibilidad, calma, belleza y energía. Establecer un vínculo emocional significativo entre el caballo y los usuarios es esencial, ya que este lazo se convierte en la piedra angular para alcanzar los objetivos y metas propuestas en las intervenciones asistidas con caballos.